Ecosistemas Interconectados: Cómo Crear Valor en un Entorno Empresarial Dinámico
Vanguardia Estratégica #13 - Sinergia Innovadora
Bienvenidos a nuestra NewsLetter. En este boletín informativo explicaremos el concepto de "ecosistema" en el ámbito empresarial, basado en el artículo "Ecosystem as Structure: An Actionable Construct for Strategy" de Ron Adner.
Vamos a descubrir cómo la interdependencia entre organizaciones y actividades han transformado la forma en la que se concibe la creación de valor.
A lo largo de esta lectura, la cual durará entre 7 y 10 minutos, queremos ofrecer una comprensión más profunda del verdadero significado de los ecosistemas, sus formas y de cómo han influido en el mundo empresarial actual
"Sinergia Innovadora"
Ecosistemas : Elementos claves
Antes de nada debemos saber cuál es la definición de ecosistema. Podemos definirlo como:
"Un acuerdo de negocios con un propósito entre dos o más entidades (los miembros) para crear y compartir valor colectivo para un conjunto común de clientes".
El artículo de Adner nos ofrece dos formas de acoger los ecosistemas. Primero nos encontramos con "el ecosistema como afiliación", donde se pone el foco en buscar aumentar el número de participantes vinculados, con el objetivo de incrementar el poder de negociación, interacciones entre diferentes actores y la intensidad en las relaciones. Adler critica que está visión limita los aspectos específicos de la creación de valor.
A raíz de lo comentado anteriormente, el autor nos presenta el segundo enfoque de los ecosistemas: el estructuralista. Sobre estos ecosistemas, los trata como: "la alineación de un conjunto multilateral de socios que interactúan para materializar una propuesta de valor". Adler defiende está definición por encima de la anterior por diferentes motivos que vamos a tratar en este informe.
Para que una empresa sea exitosa desde el punto de vista de ecosistema, debe resaltar los siguientes componentes:
Una estructura de alineación. Las personas que forman parte del ecosistema deben de estar alineados en cuanto a sus roles y flujos de actividad. De esta manera, la propuesta de valor será la misma para todos los integrantes y divisiones. La alineación puede ser latente (sin necesidad de ajuste constante) o crítica (ajustándose en momentos de innovación o cambio en el ecosistema).
Multilateralidad entre las interacciones de los actores, evitando así interacciones bilaterales.
Conjunto de socios. Los miembros del ecosistema deben de estar definidos y participar en la empresa de la que forman parte.
Materialización de la propuesta de valor. La base del ecosistema es la propuesta de valor que todos los actores buscan concretar. Por tanto, los miembros deben coordinarse y evitar llegar a un punto de divergencia que afecte a la creación de valor.
Por tanto, para que se pueda lograr esa materialización de valor de los ecosistemas, se necesitan los siguientes cuatro elementos básicos:
Actividades específicas que definan las tareas y procesos para la materialización de valor.
Actores o entidades que realicen las actividades.
Posiciones que permitan ubicar a los actores en cada una de las actividades en el sistema, estableciendo orden y jerarquía en el ecosistema.
Enlaces para especificar las transferencias entre actores, pueden ser mediante relaciones directas o indirectas.
Limitaciones y Desafíos para la Estrategia Empresarial
Una vez se definen bien tanto elementos como componentes, se elige entre un ecosistema como afiliación y un ecosistema como estructura. La elección del enfoque depende del objetivo estratégico de cada empresa y/o industria.
En caso de industrias maduras donde los cambios e innovaciones son menos frecuentes, se recomienda emplear un ecosistema como afiliación. Sin embargo, en industrias con tendencia a cambios, interacciones entre actividades o innovaciones, se recomienda emplear un ecosistema como estructura.
Desde la perspectiva estratégica, el modelo de Adner sobre ecosistemas, tanto de afiliación como de estructura, presenta una visión útil pero limitada en el contexto empresarial actual. La idea de que los participantes se alinean sin ajustes constantes no refleja la dinámica de los ecosistemas reales. En contraposición a esta idea la teoría de redes y la teoría de plataformas, los ecosistemas requieren de realineamientos frecuentes debido a la naturaleza de las interacciones y las condiciones del mercado, en constante cambio.
El énfasis en la interdependencia multilateral es un concepto que no es fácil de adaptar en las distintas etapas de crecimiento de una organización. En las empresas maduras las interacciones bilaterales suelen ser más eficientes, ofrecen mayor flexibilidad y reducen la complejidad operativa. En un entorno en constante cambio las industrias que han alcanzado la madurez y se mantienen estables, a través de relaciones directas y bilaterales ayudan a ofrecer mayores beneficios de los que podría proveer una red multilateral más extensa. Centrarse únicamente en la multilateralidad no siempre es un aspecto positivo , ya que una consecuencia directa es el aumento de la burocracia y las dificultades de coordinación, lo que va en contra del objetivo de eficiencia organizativa.
La intención de mantener un "conjunto fijo de socios", es una propuesta difícil de aplicar en ecosistemas dinámicos. Las empresas deben estar dispuestas a adaptarse y esto implica cambiar de socios en función de las oportunidades emergentes o necesidades de la organización. Mantener un actor tan relevante de forma fija sería contraproducente para conseguir ser competitivo a largo plazo. La competitividad nace bajo los conceptos de flexibilidad y capacidad para integrar nuevos actores. Es importante por lo tanto, para una organización, no tener una mentalidad rígida.
Por último, la distinción de Adner entre ecosistemas de estructuras para los sectores innovadores y ecosistemas de afiliación para industrias maduras es una simplificación utópica. Aunque en los sectores maduros los ecosistemas podrían evolucionar de forma más lenta, también existen áreas dentro de estos sectores donde la innovación estructural es clave. Ya se ha visto cómo la digitalización ha irrumpido también las organizaciones más maduras generando disrupción y acelerando el cambio.
La flexibilidad estratégica, adaptando el enfoque según las circunstancias del entorno, es esencial para navegar eficazmente en estos ecosistemas en constante cambio.
Conclusiones
En conclusión, este análisis del ecosistema empresarial nos hace ver la importancia de la compresión de las interacciones entre organizaciones para crear valor. Los enfoques (afiliación y estructura) nos ofrecen diferentes perspectivas útiles, pero pudiendo comprobar que es esencial contemplar la flexibilidad y adaptabilidad para responder eficazmente a las distintas situaciones empresariales.
Las empresas deben ajustar sus alianzas y estructuras para maximizar su competitividad y capacidad de innovación. Es así como para prosperar en ecosistemas cada vez más complejos y dinámicos las empresas deberán enfatizar en una coordinación efectiva y ajuste continuo.
Bibliografía
Adner, R. (2016). Ecosystem as structure. Journal of Management, 43(1), 39–58. https://doi.org/10.1177/0149206316678451
MALASPINA, Oriol Alcoba. Los Ecosistemas Empresariales Innovadores. Harvard Deusto Business Review, 2019, no. 289, pp. 46–56.